Hasta ahora no se se ha logrado sustituir las algas por otro tipo de alimento que se adapte a las necesidades nutricionales de las larvas de camarones. Por lo tanto en nuestro país se realiza el cultivo en los laboratorios de larvicultura.
La primera etapa se la realiza de manera interna partiendo de las cepas especificas, que se las realiza en condiciones controladas en cuartos adecuados para ello. La producción exitosa de microalgas depende de numerosos factores ambientales como el medio de cultivo, la intensidad de luz, temperatura, salinidad y pH.
Existen 14 géneros de varias especies, y las cepas puras se las obtiene de varios centros de investigación. Para estos cultivos se utilizan fertilizantes orgánicos y químicos que tiene efectos directos sobre los estanques de cultivo.
El cultivo de microalgas para apoyo de la acuicultura es una realidad en nuestro país, principalmente asociado al cultivo de crustáceos continuará impulsándose en la medida en que esta actividad económica se desarrolle en los próximos años. Los distintos usos alternativas de producción de alimento vivo para aumentar la oferta acuícola de crustáceos y calidad de exportación son en efecto uno de los puntos importantes consolidar en una empresa que quiera lograr la competitividad ante un mercado globalizado.
Varios factores a considerar para tener éxito en el cultivo de algas en los laboratorios de larvas como son: la calidad de la cepa, factores ambientales, calidad de fertilizantes. elementos trazas, manejo, asepsia, debido a que este cultivo es esencial al iniciar la "corrida" o cultivo de larvas, por lo tanto se debe planificar muy bien, antes de iniciar el mismo y luego durante el cultivo no quedarse sin alimento por falta de algas para los estadíos tempranos de los camarones.
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